sábado, 28 de mayo de 2016

Olas, por le fotógrafo Luke Shadbolt

Magníficas instantáneas de olas tomadas por el fotógrafo australiano Luke Shadbolt.








Psicología: ¿Qué es la hipótesis del mono borracho?


Se llama así a una polémica teoría que aventuró a principios del siglo XXI Robert Dudley. Según este biólogo de la Universidad de Berkeley, el alcoholismo tiene que ver con nuestro pasado biológico, ya que el alcohol etílico –tambien llamado etanol– funcionaba como un estimulante para comer fruta madura en nuestros antepasados. 

De hecho, los beneficios de un consumo moderado pueden ser indicio de que la atracción por esa sustancia psicoactiva está inscrita en nuestro genes, comenta el psicoterapeuta Luis Muiño en la revista Preguntas y Respuestas n.º 36 de Muy Interesante.

Numerosas investigaciones han reunido datos que avalan esta hipótesis. Por ejemplo, en un artículo publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), Matthew A. Carringan y sus colaboradores afirman haber encontrado las pruebas de que hace diez millones de años se produjo en los ancestros comunes de humanos y simios la mutación genética que produce la enzima ADH4, necesaria para metabolizar el etanol producido naturalmente por la fermentación de las frutas.  

Gracias a esta mutación, algunos de nuestros antepasados empezaron a comer  - además de la fruta que recolectaban subidos a los árboles como cualquier otro primate- los frutos que caían al suelo. El alcohol de esa fruta fermentada sirvió de incentivo. Gracias a su búsqueda, los simios abandonaron la seguridad de los árboles y bajaron al suelo. Este cambio de hábitat favoreció la postura bípeda erguida, el desarrollo de herramientas gracias a tener dos extremidades libres, la evolución de la inteligencia  y…el resto ya es historia.





jueves, 26 de mayo de 2016

Un viaje de 20 años a Alfa Centauri: así es la misión interestelar que planea Stephen Hawking


El multimillonario ruso Yuri Milner ha puesto encima de la mesa cien millones de dólares para impulsar una misión que nos lleve a la estrella más cercana, Alfa Centauri, a 4,37 años luz, en poco más de veinte años. Para ello, se usaría una nave tan diminuta que podríamos sostener entre los dedos, informa Abraham Alonso en la revista Muy Interesante n.º 421 de junio.

La sonda estaría propulsada por una vela solar de 2 x 2 metros que, a su vez, recibiría el empuje necesario para moverse por el espacio de un inmenso generador de haces láser instalado en tierra. Esta le proporcionaría una energía equivalente a la que producen cien centrales nucleares. Así, se podría acelerar el ingenio a la quinta parte de la velocidad de la luz. 

Con Facebook. Ahora bien, no está claro cómo se conseguirá semejante proeza, pues la tecnología que habría que emplear aún está lejos de desarrollarse. Eso sí, la inversión está ahí, y el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, también colabora en el proyecto.







martes, 24 de mayo de 2016

¿A qué se debe la lluvia de estrellas?


A lo largo de todo el año, pero preferentemente en los meses de verano, sobre todo por cuestiones meteorológicas y de visibilidad, podemos disfrutar de las llamadas lluvias de estrellas, comenta Miguel Ángel Sabadell en la revista Preguntas y Respuestas de Muy Interesante.

Todo o casi todo en este asunto tiene que ver con los cometas. Estos son, en esencia, bolas de nieve y roca. Cuando se aproximan al Sol, el agua congelada que acarrean empieza a sublimar, esto es, a pasar directamente a estado de vapor, lo que da origen a su característica cola. La baba de un cometa. Pues bien, la cola, además de dejarnos con la boca abierta, va depositando un haz de partículas pequeñísimas por donde pasa. Como muchos cometas orbitan alrededor del Sol –otros solo lo visitan una única vez–, en cada pasada van dejando una cinta de ellas, al igual que un caracol deja su rastro en el campo. Y cuando la Tierra cruza por una de estas cintas, algunos de esos restos rozan con la atmósfera, se ponen incandescentes y… ¡ahí tenemos nuestra lluvia de estrellas! Pero esas partículas cometarias no son las únicas que caen sobre nuestro planeta. También lo hacen micrometeoritos.

A todas las horas. De hecho, el Sistema Solar está literalmente plagado de ellos, afirma Sabadell. Es por eso por lo que podemos ver las estrellas fugaces en cualquier día del año y a cualquier hora: basta con que un micrometeorito despistado acabe precipitándose en nuestra atmósfera. Pero con ellos sucede algo distinto que con los cometas: es posible que ese micrometeorito no se desintegre y queden partículas flotando por la atmósfera hasta que la lluvia las arrastra al suelo. Esto sucede a diario, de manera que la Tierra aumenta de peso unas dos toneladas al día por el polvo de meteorito que cae sobre su superficie.



miércoles, 18 de mayo de 2016

Distintas formas de morir en el espacio


Death in Space is un adorable cortometraje que explica todas las posibles maneras que tienes de morir su viajas al espacio. Una animación de Thomas Lucas


lunes, 16 de mayo de 2016

Mito científico: los antioxidantes son buenos y los radicales libres, malos


Cuenta Miguel Ángel Sabadell en el reportaje 4 mitos que se resisten a morir de la revista Muy Interesante n.º 420 del mes de mayo que las leyendas y las creencias más difíciles de erradicar no son necesariamente las más fantasiosas. Existen muchas medias verdades o mentiras enteras que nacen a partir de confusiones y malas interpretaciones de la ciencia, como que los radicales libres no muy malos y los antioxidantes, muy buenos.  



En 2014, los medios se hicieron eco de una investigación que aseguraba que las verduras ecológicas eran más sanas que las obtenidas por métodos convencionales, dado que contenían un
60
% más de antioxidantes, sustancias que neutralizan los radicales libres; estos últimos son moléculas muy reactivas que aparecen en nuestro organismo como subproducto del metabolismo y provocan daño celular: arrastran una mala reputación desde los años 50, cuando el gerontólogo y químico estadounidense Denham Harman los ligó al envejecimiento

Denham Harman
La idea se extendió como la pólvora, pese a que el propio Harman fue incapaz de lograr que una dieta alta en antioxidantes aumentara la esperanza de vida de los ratones de sus experimentos. De hecho, en los 90 se disparó el consumo de vitamina C y ß-caroteno, antioxidantes presentes en frutas y verduras. 

Pero las investigaciones están erosionando esta creencia. En 2008, un equipo de científicos ingleses y belgas publicó un trabajo que demostraba que ratones genéticamente modificados para producir mayores cantidades de radicales libres vivían lo mismo que los ratones normales. Al año siguiente, investigadores de la Universidad de Texas probaron que los roedores modificados para generar más antioxidantes no eran más longevos que los normales. Los editores y revisores de las revistas científicas estaban tan imbuidos del mito de la maldad de los radicales libres que a los autores les costó encontrar una que publicara sus hallazgos. 

Y hay más: en 2014, un estudio liderado por Volkan I. Sayin, de la Universidad de Gotemburgo (Suecia), encontró que los antioxidantes aceleran el desarrollo del cáncer de pulmón en ratones. ¿Hay pruebas con humanos? Pocas y contradictorias. Una de las más recientes, conducida por investigadores daneses, ha concluido que “el ß-caroteno, la vitamina E y altas dosis de vitamina A –todos ellos antioxidantes– podrían estar asociados a una mayor mortalidad”.

Ante tanto resultado ambiguo, ¿cómo puede seguir vigente la leyenda de los antioxidantes? Buena parte de la culpa es del mercado de los suplementos vitamínicos: en 2013, el negocio de los antioxidantes generaba en Estados Unidos mil millones de dólares, que se prevé sean 3.100 en 2020. El mito se perpetúa porque hay mucha gente ganando dinero con él, afirma Sabadell.

Puedes leer el reportaje completo en la revista
Muy Interesante del mes de mayo.


viernes, 13 de mayo de 2016

Más de 300 focas son rescatadas cada año en el litoral cantábrico


Cada vez son más las focas que terminan encalladas y heridas en el litoral cantábrico. La furia del mar las arrastra desde sus colonias en las islas Británicas, y si no mueren en este tránsito, es gracias a la acción de tres ONG.

En 1999 fue noticia el avistamiento en la costa Cantábrica de las primeras crías de foca. Hasta entonces solo habían aparecido algunos ejemplares adultos. A la sorpresa le seguiría tiempo después la alarma, pues el número de estos animales encallados en riscos e islotes no ha dejado de aumentar desde finales del siglo XX, hasta rondar en el presente los trescientos por año. Casi todos ellos llegan al litoral norte español entre enero y marzo, tiempo en que las tormentas y corrientes marinas son habituales y muy intensas, informa Javier Carrascosa en la revista Muy Interesante del mes de mayo.


Ese mar revuelto propicia que muchos bebés de foca, al lanzarse al mar tras el destete, sean arrastrados lejos de sus colonias originales, ubicadas generalmente en las islas británicas y, a veces, en las costas de los países nórdicos europeos. Así acaban en el litoral cantábrico, donde quedan inmovilizados y aquejados de heridas y enfermedades, y donde estarían abocados a la muerte segura de no ser por la iniciativa de, principalmente, tres ONG. 
La Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos en Galicia (CEMMA), la Coordinadora para el Estudio y la Protección de las Especies Marinas en Asturias (CEPESMA) y la Sociedad para el Estudio y Conservación de la Fauna Marina AMBAR en el País Vasco, junto con otras asociaciones de Cantabria y el norte de Portugal, están atentas a este fenómeno y al salvamento de las focas a la deriva.

Unas veces presentan graves heridas producidas por el choque contra rocas, y otras, enfermedades, como neumonía. Llegan cansadas y deshidratadas, por lo que hay que procurarles reposo y líquidos con electrolitos. También pueden padecer parasitosis y desnutrición. En este sentido, las crías son alimentadas con leche en biberón, hasta que se acostumbran y son capaces de ingerir alimento sólido; en general, peces pequeños y muertos. 


La fase final es dejarlas que naden en una piscina hasta que recobran fuerzas y sean capaces de capturar presas vivas. Tras la plena recuperación, los pinnípedos rehabilitados son liberados en puntos del mar desde donde podrán incorporarse a sus colonias naturales. Un crotal o etiqueta identificativa, generalmente colocado en la nuca, ofrece información en caso de que el animal sea capturado de nuevo, concluye Carrascosa.

Puedes disfrutar del reportaje completo en la
revista Muy Interesante del mes de mayo


jueves, 12 de mayo de 2016

El gimnasio del bisabuelo: así nació el actual culto al cuerpo



Las máquinas en las que muchos se machacan no son algo tan nuevo. Las inventó en el siglo XIX el médico sueco Gustav Zander, pionero de la medicina del bienestar, hoy en boga.


Uno de cada cuatro españoles ha estado apuntado alguna vez a un gimnasio y casi un 10% acude a entrenarse a sus instalaciones de manera habitual, según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Dada la proliferación de centros –en España funcionan alrededor de 12.000–, parece que el interés por mantenerse en forma sea un fenómeno de las últimas décadas, pero no es así. Las máquinas que inundan los gimnasios se inspiran en las que empezaron a utilizarse en la época victoriana, a finales del siglo XIX.  

Según cuenta el periodista sanitario Francisco Cañizares en la revista Saludable n.º 6 de Muy Interesante, la difusión de estos artilugios se atribuye en gran medida al médico y ortopedista sueco Gustav Zander, que inventó muchos de ellos, y ha pasado a la  historia como uno de los padres de la fisioterapia. De hecho, algunas de las técnicas que utilizan sus profesionales para la rehabilitación de lesiones se basan en los diseños realizados por el inventor. Comenzó a trabajar en Estocolmo en la década de 1860, donde estableció el Instituto Terapéutico Zander, un centro pionero que equipó con veintisiete de sus ingenios, al que seguiría un segundo en Londres. 

En 1876 sus aparatos de gimnasia fueron premiados con una medalla de oro en la Exposición del Centenario, en Filadelfia, lo que le convenció para fabricarlas en serie. El premio catapultó a la fama su instituto: en 1906 ya había establecido sedes del mismo en 146 países. Las imágenes que se conservan reflejan un gran parecido con los aparatos que siguen utilizándose hoy. Se basaban en los mismos principios que los actuales. Zander recurrió en su diseño a un sistema de resortes y poleas para guiar el peso, que permitía al usuario graduarlo según sus capacidades. 



El sistema nació de una necesidad personal de su inventor. Tenía una constitución física débil y desde muy joven practicó ejercicio, pero su obsesión era buscar un procedimiento eficaz que ayudara a fortalecer los músculos. Cuando pudo desarrollarlo, lo orientó a los ancianos y a las mujeres, que hasta entonces era impensable que practicaran actividad física alguna. Sus innovadoras máquinas contribuyeron a sentar las bases de lo que un siglo más tarde se conocería como medicina del bienestar, concluye Cañizares.













martes, 10 de mayo de 2016

Psicología: ¿Por qué a veces nos sentimos invisibles?



 A la sensación de que el mundo nos ignora se puede llegar por diversas circunstancias. Entre ellas destaca la falta de asertividad, asegura Luis Muiño en la revista Preguntas y Respuestas n.º 36 de Muy Interesante. Este concepto psicológico define la capacidad de mantener relaciones en pie de igualdad, sin que nadie nos domine y poniendo de manifiesto siempre que sea necesario nuestras opiniones y necesidades. Las personas asertivas saben decir no, expresan sus emociones, sobrellevan las situaciones de tensión aunque no les gusten y negocian partiendo de la base de que todos somos igual de importantes. 

Cuando alguien carece de ese útil talante acaba por diluirse como individuo. Su dificultad para reivindicarse lleva a que lo ninguneen. El psicoterapeuta Jeffrey Kelly, autor del libro Entrenamiento de las habilidades sociales, enumera algunos de los rasgos que delatan a la persona pasiva: mira poco a los ojos de su interlocutor, hace pocas preguntas, le resulta difícil aceptar cumplidos, apenas gesticula, contesta a menudo con monosílabos, pocas veces contradice a los demás… De alguna manera, es como si prefiriera desaparecer. Y al final, lo consigue.
Visión selectiva. También existen razones sociales que vuelven invisibles a nuestros semejantes. Y podemos constatarlo en la vida cotidiana: nuestra mirada tiene puntos ciegos. Andamos por la calle sin percatarnos, por ejemplo, de que hay mendigos tirados en el suelo. 


En un experimento clásico, los psicólogos John Darley y Daniel Batson pidieron a un grupo de seminaristas que prepararan un sermón sobre la parábola del buen samaritano que requería ir a una biblioteca para buscar referencias. Los voluntarios tenían que cruzar un patio en el que alguien simulaba necesitar ayuda. Una gran mayoría de los sujetos estudiados –sobre todo, los que tenían poco tiempo para preparar el trabajo– ignoró por completo a la persona que simulaba sufrir; hasta el punto de que, cuando se les preguntó posteriormente, ni siquiera la habían visto, concluye Muiño.



10 requisitos para una alimentación equilibrada


Cuando vuelvas a ir al súper, no te olvides de meter en el carro nueces, té, dorada, salmón y otro pescado azul, fruta, chocolate y tabasco. Los productos de esta lista, además de sabrosos, son una garantía de longevidad y un seguro contra algunas de las enfermedades más comunes.


Que lo que te sirves en el plato de comida de hoy condiciona tu salud de mañana es incuestionable, sentencia la periodista científica Elena Sanz en el reportaje La buena dieta que publicamos en la revista Saludable n.º 6 de Muy Interesante. La ciencia ha demostrado que las fuentes de la eterna juventud, o al menos de la vejez tardía, las tenemos en la despensa. La dieta es decisiva en cómo y cuándo enfermamos. El cáncer, las enfermedades cardiovasculares, la hipertensión y el deterioro cognitivo se pueden prevenir eficazmente si tenemos en cuenta estos diez consejos:

1. Prepara más platos con lentejas
2. Bebe más té verde y blanco
3. Llena tu nevera de productos del mar, sobre todo de pescado azul (sardinas, atún, salmón...)
4. Añade nueces a la ensalada
5. Come más espinacas
6. No tomes ni una galleta por la noche
7. Condimenta los platos con picante y especias
8. Haz entre cuatro y seis comidas al día
9. Endulza el desayuno y toma chocolate negro
10. Toma siete piezas de fruta y verdura al día

Puedes disfrutar del reportaje completo en la revista
Saludable de Muy interesante.










domingo, 8 de mayo de 2016

Infecciones emergentes: estos cuatro virus esperan su oportunidad




La probabilidad de que nos afecte uno de los nuevos virus emergentes no es despreciable. En algún caso, los síntomas que provocan son leves, pero cabe la posibilidad de que el microorganismo mute y su capacidad mortífera se multiplique, advierte el periodista Francisco Cañizares en el reportaje La amenaza de los supervirus que publicamos en la revista Saludable nº. 6 de Muy Interesante. en estos cuatro tienen puesta la mirada los científicos:



Dengue. El mosquito tigre que ha colonizado el sur de Europa transmite el virus. Para hacerlo, basta con que pique a un individuo infectado y después a uno sano. Según la OMS, cada año sufren la enfermedad cien millones personas. Muchas no presentan síntomas, pero en los casos más graves se producen hemorragias con riesgo vital. Las farmacéuticas investigan una vacuna con varias cepas víricas.





Síndrome respiratorio por coronavirus de Oriente Medio (MERS). El  primer caso del síndrome respiratorio de Oriente Medio se produjo en Arabia Saudí en 2012. Los camellos son el principal reservorio del microorganismo que lo provoca, aunque en la mayoría de los casos el contagio se ha producido entre humanos. La enfermedad resulta muy virulenta; ha provocado la muerte del 35% de los afectados. Pero hay avances: una vacuna en investigación evita la transmisión del virus entre animales.


Síndrome respiratorio agudo y grave (SARS). El síndrome respiratorio agudo grave se dio a conocer en Asia en 2003 y demostró gran capacidad para propagarse. Saltó a América y a Europa, donde se han registrado alrededor de 10.000 casos. Pertenece a la misma familia que el MERS y, a diferencia de este, se ceba, sobre todo, en personas jóvenes y sanas. Aunque no se conoce con certeza su reservorio natural, se cree que lo son el murciélago y la gineta.





Chikunguña. Lo transmite el mismo mosquito que el dengue. El primer caso se describió en Tanzania en 1952. Ya se han producido brotes en Europa; el más importante en la localidad italiana de Rávena, en 2007. Se inició con un viajero que estuvo en la India y afectó a unas doscientas personas. No se dispone de vacuna contra este virus ni de cura, así que la terapia se basa en el alivio de lo síntomas.






Puedes seguir leyendo este reportaje en la revista Saludable
de Muy Interesante.